Muchos decimos que el Camino de Santiago es el mejor psicólogo y muchos otros opinamos que hacer el Camino de Santiago es una terapia en sí misma. Muchos psicólogos lo recomendamos.
Sí que hay evidencia científica de que el Camino de Santiago mejora el bienestar psicológico. Al final del artículo os dejaré algunas referencias. También hay evidencia científica de que caminar por entornos naturales reduce la actividad de la amígdala (la estructura cerebral relacionada con el miedo).
Así que ya no es cosa de locos peregrinos pensar que el Camino de Santiago es terapéutico. Es una realidad con evidencia.
Mi primer camino fue en el año 2013 y desde entonces he salido cada año a hacer algún Camino o algunas etapas de Caminos al menos una vez al año; y a veces dos o tres veces al año. No sé cuántos Caminos llevo. No importa. No cuento el número de Caminos. Cuento experiencias y aprendizajes.
Quienes me seguís desde hace tiempo sabéis que he escrito varios artículos sobre lo terapéutico del Camino de Santiago en la web especializada Gronze y en mi blog. Os dejaré los enlaces al final.
Pero para los nuevos, en este artículo que estáis leyendo, quiero mostraros de manera resumida por qué considero el Camino de Santiago una terapia en sí misma y por qué lo recomiendo siempre a todo el mundo que esté atravesando algún momento difícil en la vida.
A mí me encanta llamar caminoterapia al hecho de caminar por entornos naturales. No me importa que sea Camino de Santiago o hacer senderismo por montaña. Ambos son terapéuticos.
Pero el Camino de Santiago tiene algunas particularidades que lo hacen especialmente una terapia muy segura a diferencia de lo que puede ocurrir en montaña, que tiene más riesgos. Me explico.
Contexto terapéutico del Camino de Santiago
El Camino de Santiago transcurre por Caminos relativamente fáciles y bien señalizados donde perderse es complicado y no existen tantos riesgos de caídas o accidentes como puede ocurrir haciendo senderismo por montaña por senderos más abruptos o técnicos, desniveles muy grandes o a veces sendas sin señalizar. Sí, también soy senderista y me apasiona la montaña.
Por lo tanto, el Camino de Santiago es un contexto seguro en el que dejarnos fluir. Es como la consulta del psicólogo, un lugar seguro donde puedes abrirte. Yo, que paso sesiones de psicología online, atiendo a las personas desde la seguridad y comodidad de sus propias casas; y eso muchas veces favorece la apertura. Es algo muy parecido.
En el Camino de Santiago suele haber suficientes servicios de bares y albergues para dar seguridad al peregrino. En el Camino de Santiago resulta sencillo cubrir las necesidades básicas de comer, beber y dormir. La búsqueda de servicios para cubrir estas necesidades básicas ya es terapéutico, porque nos aporta otra dimensión a nuestra realidad cotidiana.
En montaña, dependiendo de la ruta, cubrir estas necesidades básicas necesita más preparación y organización.
En el Camino de Santiago, además, los peregrinos llevamos una misma dirección (aunque en realidad se pueden hacer bidireccionales, pero casi todos seguimos las flechas hacia el mismo lugar). Y eso proporciona una especie de abrazo psicológico por parte de otros peregrinos y nos hace sentir parte de una unidad con una misma finalidad.
Una mención especial sobre la que ya escribí un artículo, es el hecho de llevar nuestra propia mochila. Todo los objetos físicos que necesitamos para ser felices caben dentro de ella. Llevar nuestra mochila durante días es una metáfora perfecta de nuestra personalidad.
Bien. Ya hemos visto que en realidad, el Camino de Santiago puede ser como el contexto de una consulta de un psicólogo con el bonus extra de que estamos al aire libre, caminando y con paisajes variados.
Camino de Santiago como Terapia
Ahora vamos con los beneficios terapéuticos del Camino de Santiago. En el Proyecto Ultreya ya existen datos sobre los beneficios en la salud mental y emocional.
Pero, además de eso, por mi propia experiencia y las experiencias recogidas de otros peregrinos durante años, podemos hipotetizar (y que después la ciencia si quiere corrobore o refute hipótesis con datos) que el Camino de Santiago:
- nos ayuda a gestionar duelos
- facilita la gestión emocional poniéndonos las emociones a flor de piel
- fortalece nuestra autoestima
- ayuda a aliviar la depresión y los trastornos de ansiedad
- nos pone delante nuestros pensamientos más bonitos y más oscuros y de alguna manera nos “obliga” a reconocerlos, a abrazar nuestras sombras
- nos ayuda a ser más sociables y empáticos
- nutre nuestra vida al conocer a personas con pensamientos y vidas distintas a la nuestra
- nos favorece la posibilidad de prestar atención al momento presente (mindfulness en estado puro)
- favorece los estados místicos o espirituales o los estados expandidos de conciencia
- nos ayuda también a darle una dimensión más amplia a nuestra realidad
- somos capaces de darnos cuenta de nuestras capacidades físicas y mentales, a superar retos
- nos ayuda a creer más y mejor en nosotros mismos
Por todo lo anterior, considero al Camino de Santiago una terapia en sí misma. Eso sí, diría que al menos la experiencia debería de durar 15 días. Sobre todo para principiantes. ¿Por qué? Pues porque cuanto más tiempo, mejor. Día tras día y a cada paso y vivencia vamos creando nuevas conexiones neuronales, nuevos aprendizajes. Si no puedes estar mínimo 15 días, pues hazlo el tiempo que puedas.
El cambio comienza en la actitud. El Camino de Santiago y la terapia psicológica te ayudan a encontrar tu destino.
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Si me ayudas a compartir el artículo para llegar a más personas, te lo agradezco. Buen Camino 🙂
(La foto es del Camino de Santiago Primitivo, tomada en mayo de 2023. El peregrino que aparece en la foto es mi amigo Rubén, en la bajada al embalse de Grandas de Salime).
Enlaces de interés del Camino de Santiago terapéutico
- En mi categoría de blog Camino de Santiago puedes encontrar varios artículos relacionados y con lo terapéutico o el aprendizaje que nos regala el Camino de Santiago.
- En la web especializada Gronze puedes leer mis artículos relacionados con psicología y Camino de Santiago.
- Puedes consultar datos científicos sobre el Camino de Santiago en la web de Proyecto Ultreya.
- La actividad de la amígdala disminuye como resultado de una caminata de una hora en la naturaleza. Molecular Psychiatry
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